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¿Qué es?
El Marco de Cooperación de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible es un acuerdo firmado entre el Gobierno de Costa Rica y el Sistema de las Naciones Unidas. Este acuerdo se relaciona directamente con las prioridades establecidas en el Plan Nacional de Desarrollo 2023-2027 y con los objetivos globales de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
¿Cómo lo construimos?
Este Marco es el resultado de un proceso de reflexión y trabajo conjunto entre el Sistema de las Naciones Unidas y sus socios en Costa Rica. Durante este proceso, se identificaron las principales necesidades de desarrollo del país. También se establecieron objetivos claros y resultados específicos que se quieren alcanzar, aprovechando los roles y las fortalezas de la ONU.
¿Qué buscamos?
El objetivo principal del Marco de Cooperación es aplicar estos principios de manera integral. Así, se busca que las acciones acordadas tengan un impacto positivo y significativo en la vida de todas las personas en Costa Rica.
Una Costa Rica inclusiva que renueva su contrato social abrazando su identidad multiétnica y pluricultural, garantizando el ejercicio pleno y sin discriminación de los derechos humanos, la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres, las niñas y jóvenes en su diversidad.
El Marco de Cooperación busca contribuir a impactar en los persistentes patrones culturales y las históricas brechas de género, las disparidades sistémicas de ingresos y de privaciones multidimensionales, etarias, étnicas, territoriales, así como en el limitado enfoque interseccional en políticas intersectoriales, que impiden romper con la creciente desigualdad. Para ello, dirigirá su contribución a que todas las personas, en particular las mujeres en su diversidad y las personas en condición de vulnerabilidad, se empoderen y se transformen en agentes de cambio y se auto reconozcan como como sujetas de derechos, con capacidad para participar y liderar la transformación de las normas sociales y de género e incidir de manera más efectiva en la exigibilidad y el ejercicio pleno de sus derechos humanos, con un enfoque particular en las comunidades que se están quedando atrás en el desarrollo. De manera particular, el marco de Cooperación apuntará a que las mujeres, las niñas y jóvenes en su diversidad estén al centro del desarrollo, liderando su propia participación plena, en un entorno seguro, y generando mecanismos para que sus voces sean escuchadas. Dada la magnitud y la situación de la movilidad humana, el Marco de Cooperación también buscará incidir en que las personas en movilidad y sus organizaciones, cuenten con suficiente información y herramientas para ejercer sus derechos en ambientes libres de discriminación, asegurando su integración plena en las comunidades de acogida y colocándose al centro de un desarrollo sostenible que apuesta por la igualdad y la inclusión.
Una gobernanza nacional y local centrada en las personas y sus derechos, con servicios públicos eficientes, justos, transparentes, sostenibles y espacios de participación y diálogo amplios y dinámicos que empoderan a las personas, en especial a las mujeres en su diversidad y a las poblaciones en condición de vulnerabilidad, en todo el territorio.
El Marco de Cooperación contribuirá a fortalecer la eficiencia y la calidad de los servicios públicos, para la transformación y modernización de las instituciones para garantizar los derechos humanos y brindar servicios públicos centrados en las personas y sus derechos, de calidad, sin discriminación, inclusivos, innovadores, efectivos, eficientes, oportunos, sostenibles y flexibles, transformadores de género, articulados con otras instituciones, indispensables para construir una respuesta integrada para la reducción de la pobreza y las desigualdades. Además, se seguirá apoyando a los gobiernos locales para que se conviertan en los principales agentes de cambio del desarrollo local, especialmente en territorios con menores índices de desarrollo. Se fortalecerá el enfoque de gestión por resultados en la planificación y presupuestación del Estado, con enfoques de género interseccional y derechos humanos, habilitando la participación ciudadana y consolidando las alianzas entre el sector público y el privado para catalizar mecanismos de financiación innovadora que aceleren la Agenda 2030. Se afianzará el Estado de Derecho y garantizará la transparencia, la rendición de cuentas y la lucha contra la corrupción, con mayor y mejor participación de la sociedad civil.
Desarrollo de una vibrante economía creativa, innovadora, inclusiva, circular, competitiva y sostenible, que genera trabajo decente, oportunidades y prosperidad social y económica para todas las personas, incluyendo las mujeres en su diversidad y las poblaciones en condición de vulnerabilidad, a lo largo de todo el territorio.
El Marco de Cooperación contribuirá a promover las condiciones para que el país alcance el desarrollo de una economía que genere trabajo decente y crecimiento económico relacionados con la economía creativa, circular, resiliente, sostenible, inclusiva, con una inversión mayor y más equitativa en las personas, eliminando las barreras y creando capacidades y oportunidades para la producción y el financiamiento inclusivo y sostenible, principalmente en los territorios costeros, fronterizos y rurales. Una economía inclusiva, que permita que todas las personas, particularmente las mujeres y las poblaciones en condición de vulnerabilidad, participen y se beneficien de las oportunidades y la prosperidad social y económica, permitiendo mejorar la distribución del ingreso y la disminución de la desigualdad. Finalmente, el marco de Cooperación fortalecerá su contribución la innovación y competitividad, promoviendo un ecosistema de innovación a escala nacional y local, priorizando las pequeñas y medianas empresas, y el desarrollo de infraestructura estratégica sostenible, resiliente y orientada a la acción climática, que contribuya a un crecimiento inclusivo, la recuperación efectiva de la pandemia y una mayor competitividad con base en una estrategia de asociatividad multinivel y un abordaje de reducción de brechas tecnológicas en territorios costeros, fronterizos y zonas rurales.
Las personas, las comunidades, las instituciones y el territorio son resilientes, capaces de construir una respuesta sistémica que genera sostenibilidad y seguridad frente a la multiplicidad de riesgos y a las múltiples y complejas crisis sistémicas de alcance global y local que se retroalimentan entre sí, exacerbando sus impactos negativos en las personas y el planeta.
El Marco de Cooperación contribuirá a promover las condiciones para que el país alcance el desarrollo de una economía que genere trabajo decente y crecimiento económico relacionados con la economía creativa, circular, resiliente, sostenible, inclusiva, con una inversión mayor y más equitativa en las personas, eliminando las barreras y creando capacidades y oportunidades para la producción y el financiamiento inclusivo y sostenible, principalmente en los territorios costeros, fronterizos y rurales. Una economía inclusiva, que permita que todas las personas, particularmente las mujeres y las poblaciones en condición de vulnerabilidad, participen y se beneficien de las oportunidades y la prosperidad social y económica, permitiendo mejorar la distribución del ingreso y la disminución de la desigualdad. Finalmente, el marco de Cooperación fortalecerá su contribución la innovación y competitividad, promoviendo un ecosistema de innovación a escala nacional y local, priorizando las pequeñas y medianas empresas, y el desarrollo de infraestructura estratégica sostenible, resiliente y orientada a la acción climática, que contribuya a un crecimiento inclusivo, la recuperación efectiva de la pandemia y una mayor competitividad con base en una estrategia de asociatividad multinivel y un abordaje de reducción de brechas tecnológicas en territorios costeros, fronterizos y zonas rurales.